El cuerpo de la mujer va cambiando a lo largo de las diferentes etapas de la vida debido al desarrollo físico, la maternidad o la menopausia. Por tanto, las necesidades en cuanto a cirugía plástica se transforman.
Según el doctor Vila Moriente, secretario de la Sociedad Gallega de Cirugía Estética y miembro de la Sociedad Española de Cirugía Estética (Secpre), “en función de la edad de la paciente, las consultas que nos llegan con respecto a cirugía plástica varían”.
Por eso, explica cuáles son las operaciones más solicitadas en cada franja de edad:
DE 18 A 29 AÑOS.
Se trata de la primera juventud, cuando el cuerpo está culminando su desarrollo. En esta etapa, las jóvenes buscan principalmente la cirugía de aumento de pecho.
Aunque el periodo de pubertad femenina se extiende desde los 12 a los 19 años, los senos pueden crecer hasta los 21-24 años. Por tanto, “no hay que precipitarse ni tener prisa a la hora de abordar este tipo de intervenciones”, aconseja el doctor Vila Moriente. En pacientes muy jóvenes el cirujano plástico deberá informar a la paciente sobre el desarrollo natural del cuerpo y las posibles soluciones estéticas de aumento de pecho, de forma que éste quede bonito.
También son frecuentes las consultas sobre rinoplastia.
DE LOS 30 A LOS 45 AÑOS.
En este tramo de edad es en el que nos encontramos al principal grueso de madres, muy especialmente a partir de los 35.
“Se trata de mujeres jóvenes que ahora son madres. Se sienten fuertes, dinámicas y desean ver su cuerpo como antes de la maternidad ya que, si bien todas las pacientes afirman ser felices con su experiencia como madres, también es cierto que hay procesos como el embarazo o el parto que provocan alteraciones principalmente en su pecho o en su abdomen (estrías, piel sobrante, flacidez, exceso de grasa…)”, recuerda el doctor.
Por esta razón las mujeres suelen recurrir a la recolocación de mamas, abdominoplastias o liposucciones.
A PARTIR DE LOS 45 AÑOS.
Hoy en día, los 45 son los nuevos 35.
“Las mujeres continúan siendo jóvenes, con una vida laboral y social muy activa, por tanto surgen nuevas demandas como la cirugía facial, la corrección del “descolgamiento” de cuello o la blefaroplastia (cirugía de los párpados). Esta última consiste en “extraer la grasa y el exceso de piel y músculo de los párpados superiores e inferiores, lo cual corrige la caída de los párpados superiores y las bolsas de los inferiores, características que hacen que parezcamos mayores”, señala el doctor Vila Moriente.